Un estudio señala que la iluminación es responsable del 19% de la energía mundial y de alrededor de un 6% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero.
La tecnología LED (diodos emisores de luz) podría ahorrar 670 millones de toneladas de emisiones de gases de efecto invernadero cada año, según se desprende de los resultados del proyecto ‘LightSavers’, que se realizó durante dos años y medio en 12 ciudades diferentes como Nueva York, Londres, Calcuta o Sydney.
El estudio señala que la iluminación es responsable del 19% de la energía mundial y de alrededor de un 6% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero por lo que, a juicio de los autores, duplicar la eficiencia en la iluminación a nivel mundial tendría un impacto sobre el clima equivalente a la eliminación de la mitad de las emisiones de toda la producción de electricidad y calor en la UE.
El estudio también refleja que el alumbrado público con tecnología LED puede generar un ahorro energético de hasta el 85 por ciento. Además, las encuestas reflejan que los habitantes de las ciudades piloto, entre el 68% y un 90%, prefieren este tipo de iluminación, citando los beneficios sociales y ambientales.
Asimismo, la vida útil de la iluminación LED probada oscila entre 50.000 y 100.000 horas, lo que indica un alto retorno de la inversión.
El informe completo “Iluminando Clean Revolution: El ascenso del LED en el alumbrado público y su significado para las ciudades” se puede consultar en la web: www.TheCleanRevolution.org/lighting-the-clean-revolution y ha sido presentado en la conferencia de Río +20.
(Fuente: Boletín electrónico Ecoticias)